La señal de tráfico, cuyo coste es de 14.228 euros, cuenta con un sistema tecnológico que funciona con sensores de detección de vehículos

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El Ayuntamiento de Xilxes ha puesto en marcha la instalación de un semáforo en la calle Barranquet con el objetivo de regular la circulación y evitar así altas velocidades dentro del casco antiguo. La señal de tráfico, cuyo coste es de 14.228 euros, cuenta con un sistema de última tecnología que funciona con sensores de detección de vehículos.

 

La ubicación del dispositivo ha sido escogida por motivos de seguridad vial, ya que se trata de una calle estrecha considerada por el consistorio como un punto crítico de tránsito. Además, funciona automáticamente a través de la detección de toda clase de vehículos, de manera que cuando se aproximan su estado varía para moderar la circulación.

 

Esta actuación forma parte del plan de mejoras urbanísticas que el equipo de gobierno está desarrollando con acciones como el asfaltado de las calles Barranquet y Moncofa o las obras de acondicionamiento de la Calle Primero de Mayo, entre otras.